viernes, 26 de abril de 2013

Marisol y un pez llamado Ricardo

Vive en un mundo súper poblado, demasiada gente poco espacio, Marisol quiere ser astronauta, para salir de veraneo fuera de la tierra, durante el mes de marzo se cosió la chaqueta y el pantalón pero todavía le falta el casco, espera que su pez naranja se canse de dar vueltas en su pecera, pero Ricardo, no es un pez cualquiera, a veces se queda pensando con la cabeza fuera del agua, como si le interesara saber lo que sucede en la tierra, hace un estudio sociológico breve, guarda algún dato relevante en su cabeza, y vuelve a sumergirse de nuevo en el agua para seguir dando vueltas hasta el próximo dia.¿Cuanto tiempo vive un pez?, se pregunta cada mañana Marisol,yo quiero irme de vacaciones,cansada, con los tobillos hinchados, mira a Ricardo por el cristal algo empañado, pero parece que Ricardo tiene para rato. Marisol entiende que la vida es un ciclo y que la naturaleza es la que dicta cuanto tiempo estamos aquí. Por eso, aunque no tenga el traje completo y le falte el casco,Marisol quiere ser astronauta,hace poco se ha cosido las botas y ensaya los movimientos por la sala, levanta despacio una pierna y después la otra como si la ingravidez se hubiera instalado dentro de su casa, y durante un instante siente que se ha ido de vacaciones.
Ricardo, no tiene memoria de pez, por eso entiende lo que Marisol desea, hoy ha sacado de nuevo su cabeza para poder observar el mundo, pero esta vez tiene un plan pensado, hace poco haciendo un calculo exhaustivo, Ricardo supo que saltando a una velocidad de 45 km hora llegaría al jarrón de flores postrado encima de la mesita que esta al lado del sofa y así por fin Marisol podría irse de viaje. Y así fue, Ricardo, saco su cabeza de pez, miro con cierta añoranza el fondo de la pecera y de un gran salto se marcho a su nuevo hogar lleno de flores silvestres. Aquella tarde Marisol volvió a casa como cada día, se acerco a la pecera y se asusto al no ver a Ricardo, pero este no era un pez cualquiera, y sabiendo que ella se asustaría al no encontrarle,le dejo un dibujo explicativo de su plan creado con las piedras que vivían en el fondo de la pecera. Marisol no pudo evitar echar unas lagrimas, pero por fin su sueño de ser astronauta se iba a cumplir. Cogio la pecera y la lavo hasta dejarla transparente, se puso el traje y las botas y con la excitación invadiendo su cuerpo metió su cabeza en la pecera y Marisol por fin se fue de vacaciones. 

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio